Un día de excursión en la Isla de Cabrera

Si habéis tenido la oportunidad de escaparos a Mallorca unos días y encontráis que la isla se os queda pequeña (aunque nosotros somos férreos defensores de que Mallorca no se acaba nunca), si buscáis un plan diferente para hacer con los más pequeños de la casa o si, viviendo en Mallorca, aun no conocéis esta preciosa isla; os proponemos ir de excursión a la reserva marina del archipiélago de Cabrera e incluso dormir en la principal isla.

¿Dónde está la isla de Cabrera?

La pequeña isla de Cabrera se encuentra en el sur de Mallorca, justo enfrente del pueblo de La Colònia de Sant Jordi, a sólo diez millas náuticas. Para llegar hasta ella hay que ir en barco unos 45 minutos aproximadamente. Desde la Colònia de Sant Jordi hay diferentes empresas que se dedican a cubrir el trayecto varias veces al día. Nosotros elegimos Marcabrera por las facilidades a la hora de hacer la reserva online. Cuesta 40€ por adulto y 25€ por menor, y sus dos horarios son: salida a las 10.30h con regreso a las 16.45h ó salida a las 12.30 con regreso a las 18.45h.

Si tenéis la suerte de contar con barco propio o el de algún amigo o familiar, tened en cuenta que para poder fondear en la bahía de Cabrera necesitaréis tramitar su correspondiente permiso. Aquí teneís el link de la página oficial del Govern.

¿En qué consiste la excursión a la reserva marina de Cabrera?

Salimos a las 12:30 del puerto y llegamos a la 13:15 a la isla de Cabrera. Una vez desembarcados en la isla, un guarda forestal da la bienvenida y explica las normas a seguir ya que se trata de un espacio natural protegido. Súper importante: sólo hay un sitio donde se puede fumar, hay que ir siempre por los caminos marcados, no llevarse ningún souvenir (como conchas o plantas), y no dejar ni rastro de basura.

Al llegar al muelle os encontraréis con el punto de información de los guardas forestales y con la cantina. Si no habéis venido preparados con vuestro picnic, ahí os podrán preparar algún bocadillo o alguna tapa. Justo detrás veréis el camino que sube al castillo de Cabrera, del siglo XIV, esculpido en la piedra y digno de cualquier localización de Juego de tronos. La entrada es gratuita y la panorámica sobre toda la bahía y el puerto natural vale la pena, toda una recompensa después del esfuerzo de subir sus escaleras.

Siguiendo el camino marcado que bordea la bahía llegaréis tras 20 minutos a pie a la primera playita. El agua suele estar cristalina y es ideal para hacer snorkel. Esta playa suele estar más concurrida ya que es la que cae más cerca del muelle. Si os animáis a caminar un poco más, una hora aproximadamente, y seguís el mismo camino llegaréis a una segunda calita. Suele haber menos gente pero tened en cuenta el tiempo para no perder el barco de vuelta. También veréis que hay un camino para llegar hasta el Faro Enciola, en el otro extremo de la isla.

Justo antes de llegar a la primera calita, está el segundo muelle, que es desde donde salen los barcos de regreso a Mallorca, y detrás encontraréis una serie de barracones, antes de uso militar, pero a día de hoy reformados y que dan servicio de albergue.

Otra actividad que encontraréis es la visita el Museo Etnográfico es Celler, que abre de 12:30 a 15:00, cuesta 2euros por persona y recoge elementos de la naturaleza relacionados con el parque y tiene un pequeño jardín botánico. El camino es aquel que está justo detrás de la zona del merendero.

Nosotros estuvimos descubriendo la isla hasta las 17:00 y nos volvimos con el último ferry, el de las 17.30.

Parada en la Cova Blava

Antes de marchar de Cabrera hicimos una última parada en la conocidísima Cueva Azul. Entramos con el barco y tuvimos oportunidad de pegarnos un baño en su fría y azul agua, tal como su nombre indica.

Además, en el trayecto de vuelta tuvimos la suerte de ver un banco de atunes saltando, y nuestro capitán se acercó los suficiente como para que todos lo pudiéramos ver. Y luego llegaría la sorpresa final del día, nos cruzamos con una pareja de delfines!

¿Puedes quedarte a dormir en la isla de Cabrera?

La respuesta es sí. Como os hemos comentado antes, la antigua zona de barracones que hay junto al muelle se convirtió en un albergue en el que poder quedarse a pasar la noche. Así que si os animáis a pasar la noche y poder descubrir mejor la isla, haced la reserva con tiempo ya que suelen estar bastante concurridos. Nosotros no nos quedamos a dormir… pero así tenemos la excusa para volver… ya que queremos ver el cielo y las estrellas sin nada de contaminación lumínica! Si estáis pensando en quedaros a dormir en Cabrera pinchad aquí para hacer vuestra reserva. (El albergue lo gestiona directamente el IBANAT, que depende del Govern Balear).

Excursión muy recomendada para niños

Ir a pasar el día a la isla de Cabrera es una muy buena opción si estáis buscando un plan para hacer con niños. Es una excursión muy sencilla y con todo tipo de facilidades. La excursión ofrece un día muy completo en el que los niños disfrutan del contacto directo con la naturaleza, aprenden cosas nuevas, aprenden a respetar el entorno marino y descubren nuevas experiencias!

Nosotros fuimos con nuestro sobrino de 4 años y se quedó entusiasmado! Fue una gran experiencia que os recomendamos a todos los que viajéis con niños!

Si sois de los que viajáis dentro del territorio nacional y os gustan las islas, no dudéis en consultar nuestros posts de las Islas Baleares o de las Islas Canarias. ; )