Las primeras ciudades mayas surgieron en torno a 750 a.C. Por toda la región del Yucatán hasta Chiapas (e incluso en Guatemala, Belize y Honduras) podemos encontrar restos de las ciudades e imperios que crearon los mayas, que nos muestran la grandeza y esplendor que llegó a adquirir esta civilización.
Tanto si uno viene de vacaciones por una semana a un resort todo incluido, como si planea quedarse una temporada más larga en la región; no puede irse de la península de Yucatán sin visitar al menos una de las ruinas mayas de la zona.
Todas las ruinas y restos arqueológicos están gestionados por el INAH, Instituto Nacional de Antropología e Historia (en su página web encontrareis más información al respecto e, incluso, tours virtuales). Son los que se encargan de la administración, restauración e investigación de los yacimientos existentes; así como de los nuevos descubrimientos. El precio de la entrada a las ruinas es siempre el mismo: 65 pesos (a excepción de la población del país, que tiene descuentos y entrada gratuita los domingos).
Os recomendamos que, si podéis, intentéis llegar siempre a las ruinas a primera hora: os ahorraréis colas y masificación de gente y evitaréis las peores horas de calor (en algunos yacimientos, como por ejemplo Tulum, es difícil encontrar una sombra). También os aconsejamos que al menos en alguna de las ruinas que visitéis contratéis los servicios de un guía. Os dará mucha mas información sobre el yacimiento y os permitirá apreciar y aprender muchos más detalles. Lo mejor es que contratéis el guía en las primeras ruinas que visitéis para tener una visión general de la civilización maya y os permitirá así ir por libre y entender mejor las siguientes ruinas que visitéis.
Las 5 ruinas mayas más importantes del Caribe mexicano
1. CHICHÉN ITZÁ
Son las ruinas mayas por excelencia, una de las Siete Maravillas modernas y las ruinas mayas más famosas y más visitadas. Están situadas a unas dos horas y media de la zona de Cancún y Playa del Carmen. Se puede ir fácilmente alquilando un coche yendo por la carretera 180. Una vez que llegas allí, sorprende verlo tan masificado y tan «desarrollado». Hay coches por todo, restaurantes, gente vendiendo por todos lados, puestos ambulantes… es un poco locura. Pero la visita merece la pena. Si queréis leer mas sobre Chichen Itzá os recomendamos leer el POST Chichen Itza, maravilla del mundo, dónde encontraréis mucha más información al respecto.
2. RUINAS DE COBÁ
Quizás fueron las que más nos gustaron a nosotros. Están menos masificadas que Chichen Itzá y tienen más encanto. Son unas ruinas que se encuentran enclavadas en la pura selva. Eso le confiere un encanto especial, sobretodo cuando estás en la cima de la pirámide principal y puedes admirar las increíbles vistas.
Cobá está aproximadamente a unas dos horas de Playa del Carmen. Para llegar a las ruinas tenéis 3 opciones. La primera es ir con un tour organizado. Suelen salir en autobuses o furgonetas grandes y te llevan hasta las ruinas, después a comer y hacen una parada final en el pueblo de Tulum. La segunda opción es ir con “colectivo”. Los colectivos son furgonetas combi que hacen recorridos por toda la zona. Para ir con este medio de transporte tendréis que coger un colectivo por la carretera federal hasta el cruce donde sale el desvío que lleva a Cobá. Os bajáis en ese desvío y allí tendréis que coger un colectivo (o un taxi) que os lleve hasta las ruinas.
La tercer y última opción es alquilar un coche, que es lo que hicimos nosotros. Eso os dará mucha mas libertad y, además, a la vuelta podéis acercaros a descubrir el pueblo de Tulum o parar a daros un baño en alguno de los cenotes que hay de camino (nosotros nos paramos en Gran Cenote, aquí podéis leer el POST Cenotes de la Riviera Maya donde hacer snorkel). La ruta en coche es muy sencilla y está perfectamente indicado en todas las señales a lo largo de todo el trayecto.
Al entrar en el yacimiento de Cobá se puede alquilar una bicicleta para moverte por el recinto de forma independiente… no cuestan casi nada y os darán mucha más libertad para ir descubriendo las diferentes zonas y ruinas del recinto. Si no tenéis ganas de pedalear ni de caminar también existe la opción de que alquiléis un bicitaxi. Solo tenéis que negociar el precio e irán llevándoos por las ruinas de forma original. Nosotros alquilamos dos bicis y fuimos descubriendo por nuestra cuenta las diferentes zonas del yacimiento que hay. Como en la mayoría de yacimientos mayas encontraréis varios núcleos urbanos, el patio de juego de pelota, algunas pirámides de menos tamaño dedicadas a ritos menores…
La parada final es en la pirámide principal de Nohoch Mul, de unos 42 metros de altura y a la que sí se puede subir. La verdad que no está del todo restaurada así que hay que ir con cuidado cuando se sube… hay una cuerda en la zona central de la escalera por la que hay que ir trepando con cuidado. Más que por vosotros id con cuidado con los otros turistas que intentan subir, no vaya a ser que se os caiga alguien encima.
Una vez en la cima las vistas son espectaculares! Hay una vista panorámica de prácticamente 360º sobre la selva que envuelve estas ruina. Es fácil imaginarse el esplendor y grandeza que alcanzó la civilización Maya.
3. RUINAS DE PALENQUE
A diferencia del resto de las ruinas de este post las ruinas de Palenque no se encuentran en la península del Yucatán ni en el estado de Quintana Roo. Estas ruinas se encuentran en las afueras de la ciudad que tiene el mismo nombre Palenque, en el estado de Chiapas.
Son unas ruinas enormes formadas por multitud de distintos edificios, templos, pirámides, fosos, etc. Además de los 65 pesos de la entrada tendréis que añadir otros 60 pesos. Las ruinas de Palenque se encuentran dentro de una zona que es como un parque natural, motivo por el cual tiene un coste extra. La entrada a las ruinas da acceso al yacimiento principal, al recorrido por la selva y al museo.
Lo que más nos impactó de estas ruinas fue su tamaño y extensión y, sobretodo, el enclave en el que se encuentra, en medio de una frondosa y verde selva. Si queréis saber más sobre estás ruinas os recomendamos leer el POST Palenque: ruinas mayas en la selva mexicana.
4. RUINAS DE TULUM
Están situadas a la entrada de la ciudad. Son las ruinas más accesibles, ya que son las más cercanas a Playa del Carmen y están perfectamente comunicadas. La mejor forma de llegar es cogiendo un “colectivo”. Os costará entre 20-40 pesos dependiendo de dónde estéis y os dejará en la misma entrada de las ruinas. Desde la entrada tendréis que caminar unos 15 minutos hasta llegar a las taquillas.Entraréis a las ruinas por una de las entradas que hay en el muro de defensa de la ciudad. Una vez dentro veréis el rasgo más destacado de las ruinas mayas de Tulum: están situadas en un acantilado delante del mar. En su época Tulum fue una importante ciudad comercial: debido a su estratégico emplazamiento tuvo un gran papel en el comercio y las relaciones exteriores de la civilización maya.
Las ruinas de Tulum están muy bien conservadas. Es una visita que fácilmente se puede hacer en una hora y media. Podéis recorrer tranquilamente sus construcciones y sus plazas y observar la perfecta organización que tenía la ciudad.
En el mismo recinto hay un acceso a la playa donde uno puede darse un baño para refrescarse. Sobretodo en los meses de más calor es lo más recomendable, porque si algo no hay en las ruinas de Tulum es sombra. Todo el yacimiento se encuentra al descubierto. Al igual que en el resto de ruinas de la zona en la misma entrada se puede contratar un guía particular.
Después de la visita a las ruinas podéis ir caminando a “Playa Paraíso”. Está a unos 20 minutos a pie y es una playa increíble… es la típica playa de postal: arena blanca, aguas cristalinas y palmeras alrededor…
5. LAS RUINAS DE EK BALAM
Son unas ruinas muy bien conservadas que se encuentran a media hora escasa al norte de la ciudad de Valladolid. Lo mejor para visitarlas es alquilar un coche y aprovechar la misma visita a Valladolid para acercarse a ver las ruinas de Ek Balam.
Es un yacimiento que se puede visitar en unas dos horas y son unas ruinas en las que, a diferencia de Chichen Itzá y como Cobá, sí se permite subir a la cima de la acrópolis. Las vistas desde arriba merecen la pena ya que las ruinas se encuentran en medio del bosque.
Una de las cosas más curiosas que se encuentran en este yacimiento son los guerreros alados en el altar del jaguar… llama la atención ver figuras aladas en una construcción previa al nacimiento de la religión católica.
Otra de las cosas que nos gustó mucho de estas ruinas es la forma en que está construida la pirámide principal. A diferencia de otras pirámides que solo tenían una función religiosa y/o de culto, en Ek- Balam la pirámide servía también como residencia para los habitantes más nobles de la ciudad. Así, a medida que vayáis subiendo, veréis como hay varias “terrazas” a diferentes niveles. Esas terrazas eran utilizadas por sus habitantes en su día a día.
Al lado de las ruinas hay un cenote bastante grande en el que darse un baño para refrescarse, sobretodo en la época de verano, y hacer un poco el payaso, ya que hay varias lianas desde donde poder saltar… Si tienes pensado visitar estas ruinas puede que te interese nuestro POST “Valladolid no sólo se encuentra en España”.
Si estáis pensando en visitar México, os animamos a que consultéis nuestros posts sobre el país. Y si tenéis alguna, duda escribidnos un comentario! ; )